La ciencia podría haber encontrado la respuesta a cómo calmar el llanto de los bebés. No te pierdas los resultados de este interesante estudio japonés.
Si tienes bebés, es probable que alguna vez te hayas preguntado cómo calmar su llanto. Verlos llorar es una de las situaciones más estresantes para cualquier padre o madre. Además, si no saben por qué lo hace ni como consolarlos, la angustia y la desesperación se hacen intolerables.
Pues bien, un reciente estudio japonés, publicado en la revista Current Biology, podría traer la fórmula científica para tranquilizar y dormir a los bebés cuando lloran. ¡Te lo contamos todo!
Mover al bebé alivia su llanto
La ciencia se ha preocupado por el estudio y comprensión del ser humano en todas sus etapas. A ese volumen de investigación, acaba de entrar una muy interesante que centra su atención en una forma común de expresarse para los más pequeños: el llanto.
Así, la publicación antes mencionada destaca la importancia del movimiento para tranquilizar el llanto de los lactantes, al igual que el papel de caminar en brazos con los bebés para poder calmarlos, siendo esta la forma más efectiva para lograr apaciguar su llanto en un tiempo corto.
Se estudiaron 21 bebés de hasta 7 meses
Para analizar cómo calmar el llanto de los bebés se estudiaron a 21 lactantes de hasta 7 meses de edad. Aunque es una muestra pequeña, el resto de su metodología es sólida.
El estudio se elaboró a partir de 32 sesiones en las que se monitorizó a los lactantes mediante electrocardiogramas y cámaras de vídeo para registrar sus expresiones y movimientos.
4 métodos para calmarlos
Los investigadores compararon cuatro métodos: pasear con los bebés en brazos, permanecer sentados mientras los cogían, dejarlos en una cuna estática y utilizar una cuna mecedora.
El primer y el último método conseguían calmarlos, lo que sugiere que no es suficiente sostener a los niños, sino que estos necesitan movimiento, como veremos a continuación. Y es que, después de 5 minutos de paseo, ningún bebé lloraba y el 45 % de ellos se había dormido.
Resultados
Ohmura, Okuma y colaboradores han mostrado que la forma más rápida de calmar el llanto de un bebé es cuando la madre lo sostiene entre sus brazos y se mueve con él, es decir, cuando camina mientras lo carga. Asimismo, determinaron que esto debe hacerse durante un período de entre 5 a 8 minutos, tiempo tras el cual pueden tranquilizarse.
No solo se trata del cese del llanto, sino que además esta práctica ayuda a disminuir el ritmo cardíaco de los bebés, permitiéndoles serenarse en menor tiempo y ayudándolos, incluso, a conciliar el sueño con mayor facilidad.
También se recomienda seguir sosteniendo a los pequeños en brazos durante un tiempo igual, es decir, de 5 a 8 minutos, mientras se está sentada en un sofá, y no acostarlos de manera inmediata. De esta manera, los efectos de la técnica se afianzan mucho más y su sueño se vuelve más estable.
Así pues, esta técnica requiere de un tiempo máximo de 16 minutos en total. Para muchos padres ese lapso es muy reducido en comparación con el que emplean para calmar a sus bebés utilizando otro tipo de estrategias.
Un hallazgo interesante
Este estudio evidenció que, a la hora de entender cómo calmar el llanto de los bebés, el movimiento que produce caminar con uno en brazos ayuda a que se calme y se duerma con mayor facilidad. Sin embargo, y curiosamente, se determinó que aunque la técnica es eficaz en niños que lloran, no sucede así en los que están calmados.
En otras palabras, los niños que lloran, al ser sostenidos en movimiento, se suelen calmar en un tiempo máximo de 8 minutos, tiempo tras el cual suelen quedarse dormidos. Pero esta técnica no parece funcionar para conciliar el sueño en bebés que no lloran.
A pesar de que la técnica puede no funcionar en todos los casos, sí es una estrategia con la que se pueden conseguir resultados positivos. Además, es una intervención sencilla y rápida de aplicar.
Otras formas de reducir el llanto
Antes de intentar calmar el llanto de los bebés, debes averiguar primero por qué lo hacen, así podrás actuar de manera más efectiva contra su reacción. Existen muchas razones por las que un pequeño llora, entre ellas se encuentran las siguientes:
- Es posible que esté llorando porque tiene hambre.
- Otra razón es que tiene dolores estomacales o espasmos intestinales. Por lo general, estos malestares se presentan porque ha comido mucho o no le han sacado los gases.
- También es muy común que llore porque tiene cólico.
- Las lágrimas incontenibles pueden presentarse como consecuencia de la incomodidad de tener un pañal mojado o sucio.
- De igual modo, puede llorar porque tiene demasiado frío o calor.
- Está sobresaturado y agobiado por la estimulación externa: ruidos, luces, contacto, etc.
No te alarmes mucho si tu peque llora a cada rato, ya que es la única forma que tiene de comunicarse contigo. Los llantos son tan usuales que el personal de la Clínica Mayo estima que un recién nacido llora aproximadamente más de una hora al día.
En este contexto, tu labor consistirá es determinar por qué lo hace y luego decidir qué hacer. No pienses que al darle la atención que necesita lo estás malcriando. Recuerda, es un bebé que requiere de tu sostén.
A continuación te presentamos otras estrategias para calmar el llanto de los bebés, sugeridas por la American Academy of Pediatrics y los médicos pediatras Patti Ideran y Mark Fishbein:
- Envuelve a tu pequeño en una manta ligera para brindarle una sensación de protección.
- Acomoda a tu bebé en tus brazos, posicionándolo hacia el lado izquierdo para mejorar la digestión o con el estómago hacia abajo para darle soporte.
- Proporciónale caricias leves en la espalda. Al momento de dormir, asegúrate de que esté recostado boca arriba en su cuna.
- Activa un sonido calmante. Los ruidos que evocan el ambiente del útero, como un aparato de ruido blanco, el murmullo de un abanico o una grabación del pulso cardíaco, pueden ser reconfortantes.
- Observa al pequeño y permite que sus miradas se encuentren.
- Háblale mientras lo miras.
- Coloca tu mano sobre su pecho.
- Acomoda sus brazos cruzados sobre él o dobla sus piernas hacia su abdomen.
- Gíralo para que quede de lado.
- Ofrécele un chupete para que lo succione.
- Si consideras que puede calmarlo, dale alimento.
Atender y responder al llanto de tu bebé es necesario para su desarrollo. Cada infante es diferente y lo que a uno le sirve al otro puede que no. Es importante que seas paciente, tolerante y observador para que así actúes de manera más asertiva y precisa.
Conclusión
Llorar es el medio de comunicación de los lactantes y a través de ese acto ellos buscan satisfacer sus necesidades más inmediatas. Para muchos progenitores esas lágrimas son indescifrables y no saben cómo proceder.
La investigación de Current biology le deja a estos padres y madres una solución fácil, rápida y efectiva de calmar el llanto de los bebés: moverse. Los desplazamientos le permiten al infante tranquilizarse y atenuar su llanto.
Para terminar, es fundamental tener presente que cada infante es único, y lo que funciona para uno puede no ser efectivo para otro. Por ello, es esencial que los cuidadores sean flexibles en sus intervenciones y busquen siempre la mejor manera de satisfacer las necesidades del bebé.
